esto lo escribí el 2016

No sé cuanto más viviré, quisiera estar viva hasta muy vieja, morir dormida y en paz, ojalá con mi esposx o mascotas en ese entonces, preferiblemente gatos, todos rodeando mi cama. Lo que quiero realmente es vivir feliz y libre, en este mundo de mierda todo es avaricia, egoísmo y sistemas, todo lo que vemos en el entorno es la obra del imbécil ser humano, es tan maravilloso y a la vez un desastre. Todo depende de plata, de material, de objetivos, de ganancia, de futuro, pero ¿cuándo va a depender de SER y no QUERER?, el humano está siempre “necesito esto para tener eso”, “hay que hacer esto para poder obtener aquello”, siempre es así, en vez de aprender de uno, de la especie humana, estamos destruyendo todo a nuestro paso, lo peor de todo es que nos damos cuenta y no hacemos nada al respecto, vemos como el mundo se va tornando café cuando hace 100 años era verde, que se espera para el 2100, si es que se logra llegar a ese año.

Todo lo que fuimos alguna vez en la prehistoria, cuando aprendíamos de la naturaleza, de la pachamama, de la madre tierra o como le quieran llamar, ahora en el presente, está destruido, por acabarse, es un crimen lo que hacemos, todo lo creado por el ser humano, hasta el objeto más insignificante daña a lo que una vez fue planeta Tierra. Ahora todo es un sistema, explotar la naturaleza para el consumo humano, para que los poderosos puedan obtener más y más, las ciudades son un caos, hechos como habitad humanoide, para vivir ahí, consumir lo que se trae de otros lados plagados por seres humanos, para “vivir”, para “aprender” desde los 4 años cosas sistemáticas, como los colores, letras, sumar, restar, dividir, lo que luego lleva a trabajar toda la vida, y de qué sirve? A eso le llaman vida? A estar esclavizado haciendo estupideces que los de arriba quieren que hagas?. La vida está hecha para aprender de ella, no de los errores humanos, para aprender de la tierra, de la naturaleza, de los animales, para explorarse a uno mismo, no para estar sentado 8 horas haciendo algo que quizás ni te guste, para que puedas comer y tener un “hogar”. Todo eso podríamos estar haciéndolo libremente.

Todo es culpa de algún puto ser humano hace muchos años atrás, que se le ocurrió adueñarse y querer, querer, querer, querer hasta llegar a un punto de crear objetos destructivos como las armas, para ir a saquear y matar a otro lado, a indios que aun podían ser otro tipo de mente, amando la tierra, amando la vida de los demás, AMANDO. Maldigo ese estúpido pensamiento de avaricia y egoísmo, de querer “conquistar” otras partes del mundo para ser “rey” de tu especie. Hasta donde hemos llegado, a la sobrepoblación, desnutrición, crueldad, violación al derecho de vivir, enfermedades, egoísmo, destrucción, explotación, esclavización, y así una lista gigante del desvío que hizo el ser humano hacia su crecimiento. Ojala hubiese sido crecimiento mental del bueno, así todo sería distinto, ni siquiera estaría escribiendo, quizás estaría mirando las estrellas, analizando la posición en la que están, todo alineado, todo preciso, o tal vez estaría haciendo una fogata para calentarme y dormir, o conociendo todo tipo de árboles que habría, sus troncos, sus texturas, sus hojas, frutos, altura y sus habitantes, hasta yo podría ser habitante de uno. Seria todo maravilloso, aire fresco, cero contaminacion, todo limpio, un montón de estrellas y nebulosas, muchas flores y arbustos, animales inimaginables hoy extintos, hasta mis enemigos serían los mismos animales que me acechan y tratan de comer, al igual que otros serian mis amigos y dormiríamos juntos, abrigados. Pero nada de esto será real, todo es una fantasía y así me hubiese gustado realmente vivir, así se vive, así tenía que ser.